El nivel de tecnología que se utiliza en la Argentina para confeccionar un silaje de maíz es similar al utilizado en otros países del mundo.
En ese sentido, los especialistas señalan que es momento de poner atención en la calidad para incrementar la eficiencia y ajustar el costo directo de mayor impacto como es la alimentación.
“En maíces para silaje no solamente hay que poner el foco en la espiga y el grano, sino que también debemos aprovechar la planta entera”, sostiene Thomas Widmer, especialista del INTA Venado Tuerto.
La buena calidad nutricional del silaje de maíz como forraje y altas producciones de materia seca por unidad de superficie siempre son deseables por los productores en unidades productivas de carne y leche.
“Es importante saber que tanto los híbridos para grano como los destinados a silaje son materiales que insumen mucha tecnología, principalmente fertilización”, dijo el referente, instando a los productores a no caer en reducciones respecto al uso nutricional del cultivo.
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