La UE acelera el acceso a los biopesticidas y reduce los plazos de aprobación

La UE acelera el acceso a los biopesticidas y reduce los plazos de aprobación
marzo 10, 2025 - by Internacional
Compartir en Redes Sociales

Ante el riesgo de que los retrasos normativos alejen la innovación de Europa, el Ejecutivo comunitario acaba de anunciar un plan para acelerar la aprobación de bioplaguicidas y tecnologías de biocontrol.

La Comisión Europea está dispuesta a revisar el marco actual para la comercialización de ambos, anunciando nuevas normas de la UE para acelerar las aprobaciones en el último trimestre de este año, seguidas de la tan esperada Ley de Biotecnología de 2026, que se espera llene los vacíos restantes. Con los objetivos de reducción de plaguicidas aparcados indefinidamente, el avance más significativo esbozado en la Visión de la Agricultura y la Alimentación se refiere a las alternativas a los plaguicidas químicos.

Los biopesticidas, derivados de materiales naturales, ofrecen soluciones para el control de plagas con un menor impacto ambiental que los pesticidas convencionales. Entre ellos figuran hongos que infectan y matan pulgones y escarabajos, virus que atacan a determinadas orugas y aceites esenciales como el de clavo, que repele las plagas.

Del mismo modo, las soluciones de biocontrol utilizan organismos vivos -como las mariquitas que se alimentan de pulgones y las larvas de crisopas que consumen pequeñas plagas de insectos- como enemigos naturales de las plagas en lugar de una gestión de plagas basada en productos químicos. Recientemente se han introducido nuevas sustancias, como microorganismos, péptidos, proteínas, hormonas, células muertas, material de fermentación, extractos microbianos e incluso ARN, para aplicaciones tanto de biopesticidas como de biocontrol.

Sin embargo, el proceso de aprobación de estas sustancias en la UE está anticuado, ya que se basa en un marco establecido hace más de 15 años. También es notablemente lento, ya que la autorización de comercialización tarda una media de siete a nueve años, frente a sólo dos o tres años en regiones como América y Asia.

Una normativa estancada
Los esfuerzos para mejorar el marco actual de los bioplaguicidas y el biocontrol se incluyeron en la gran reformadel marco de plaguicidas de la UE -el reglamento sobre el uso sostenible de los plaguicidas o SUR- y obtuvieron un amplio apoyo político antes de que se estancaran los debates. Cuando las negociaciones fracasaron, la Presidencia belga del Consejo de la UE intentó salvar al menos esta parte de la propuesta, centrándose en abordar el vacío legal que rodea la aplicación aérea y el biocontrol.

Sin embargo, este esfuerzo se vino abajo junto con el resto del marco sobre plaguicidas después de que la Comisión Europea retirara la propuesta. Jennifer Lewis, Directora Ejecutiva de la Asociación Internacional de Fabricantes de Productos de Biocontrol (IBMA, por sus siglas en inglés), afirma: «Fue descorazonador, teniendo en cuenta la cantidad de trabajo que se dedicó a ello.

La nueva legislación que ahora se estudia pretende introducir una definición clara de las sustancias de biocontrol y permitir a los Estados miembros autorizar provisionalmente productos fitosanitarios que contengan sustancias biológicas mientras se realizan sus evaluaciones.

«El objetivo es facilitar el acceso al mercado manteniendo al mismo tiempo la protección del medio ambiente y la salud», declaró un alto funcionario de la Comisión. El funcionario también señaló que el objetivo es agilizar el proceso de aprobación del mercado a través de un procedimiento acelerado, garantizando que estos productos lleguen al mercado de manera más eficiente.

Una cuestión de competitividad
La próxima Ley de Biotecnología, prevista para el año que viene, podría contribuir aún más al proporcionar un vehículo legislativo para apoyar mejoras en el marco actual y acelerar la autorización de productos de biocontrol.»Dado que estas mejoras ya estaban previstas en la propuesta SUR, debería ser un proceso rápido integrarlas en la Ley de Biotecnología», dijo Lewis.

En una entrevista con ‘Euronews’, el Comisario europeo de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen, destacó la importancia de la Ley de Biotecnología en este sentido. «Necesitamos alternativas inocuas a los pesticidas clásicos, comercializarlas y acortar mucho los procedimientos de aprobación. Esto supondrá un verdadero cambio sobre el terreno», afirmó Hansen.

Sin embargo, el largo proceso de aprobación ya está teniendo un impacto significativo. El actual calendario de autorización significa que más de 100 sustancias cuya presentación está prevista entre 2024 y 2028 no recibirían la aprobación hasta entre 2031 y 2037. Este retraso hace que Europa sea menos atractiva para las empresas de biocontrol que no dan prioridad al mercado de la UE, y algunas de ellas están trasladando sus programas globales de presentación a Norteamérica y Brasil, donde la aprobación tarda sólo dos o tres años, o incluso sólo uno o dos años, respectivamente.

«Europa está viendo cómo las empresas desarrollan soluciones de biocontrol en proyectos Horizon de la UE financiados con fondos públicos, sólo para que estos productos se lancen y comercialicen fuera de Europa debido a que los procesos de autorización son más cortos en otros lugares», señaló Lewis de IBMA.

Las empresas de biopesticidas se enfrentan a un reto similar. «El rendimiento de la inversión en Europa es un 30% inferior al de otras partes del mundo. Si uno es empresario y observa esta dinámica, puede preguntarse si merece la pena invertir aquí», dijo Olivier De Matos, director general del lobby de productos fitosanitarios de la UE Croplife Europe.

Una encuesta interna de Croplife vista por ‘Euronews’ reveló que el 55,7% de los 85 encuestados, representantes de la industria, asociaciones comerciales, académicos y organismos gubernamentales, afirmaron que no tienen previsto presentar una sustancia activa bioquímica o un producto similar para su aprobación en la UE.

El 67,2% de los encuestados, a pesar de su interés inicial, decidió no solicitar el registro en la UE. Sólo el 27,9% declaró haber registrado una tecnología novedosa fuera de la UE, principalmente en EE.UU., Brasil y Nueva Zelanda. Según De Matos, de Croplife, otros continentes han identificado la agricultura como un sector estratégico, garantizando a sus agricultores el acceso a las herramientas necesarias para seguir siendo competitivos. «Tenemos que hacer lo mismo en Europa si nos tomamos en serio la competitividad y queremos mantener nuestro liderazgo», añadió.

Euronews

Share this post? Facebook Twitter Linkedin

Informativo Arriba El Campo